"La incapacidad de la Justicia..."

Mientras en las mesas de café la discusión era si debiera haber o no represalias contra las manifestantes que el lunes pintaron el monumento a Los Montejo, un amigo compartió en su Face una discusión en la que se ve a un hombre agrediendo a una mujer con un bebé en los brazos. En medio de los gritos, el tipo destruye un auto que es de suponer, pertenece a ella. Al final, cuando el tipo sube a su auto, ella le arroja una piedra. 

Los vecinos llamaron al 9-1-1. La afectada junto con ellos acudieron al Centro de Justicia para Mujeres a interponer su denuncia alrededor de las 11 de la noche, pero no fue hasta casi las 4 de la mañana que fueron atendidos. En ese lapso de tiempo, no se tuvo la atención de personal médico ni psicológico, incluso se negaron a tomar la versión de mi amigo como testigo. 

Es fácil comprender que la chica, de unos 28 años, tema por su vida y la de sus 3 hijos. Anteriormente ya ha sido lastimada violentamente, torturada y violada. Perdió un bebé por los golpes que recibió del mismo atacante que es abogado pero al parecer ha logrado salir libre… ¿cómo? Imagine usted. Incluso afirman que hay denuncias previas del 2015 y 2016. 

Esta incapacidad de la justicia por ponerle un alto a los agresores desde la primera vez, es lo que me complica argumentar contra quienes dañan los monumentos de la nación. Ya lo dijo el periodista Jorge Zepeda Patterson hablando de un personaje político que terminó su mañanera diciendo “Quedas pendiente, corazón”. Resulta que una reportera quería preguntar algo pero se acabó el tiempo. El periodista comprendió que “el Presidente no entiende que no entiende el fondo del problema”. 

En mi caso personal, de seguro yo tampoco entiendo que no entiendo la lucha de las mujeres que se expresaron contra la imposición que el alcalde César Bojórquez nos hizo del monumento a los Montejo, monumento que por cierto, no tiene valor histórico.