La candelaria que se venera durante la feria de Valladolid

25 de enero de 2018

La candelaria que se venera durante la feria de Valladolid

Este viernes comienza la feria de Valladolid en honor a La Candelaria, una advocación mariana que tuvo su origen en España y, de acuerdo con el calendario litúrgico, se celebra cada 2 de febrero. 

La veneración de la imagen hace referencia a la presentación de Jesús en el templo de Jerusalén después de su nacimiento y la purificación de María como marca la ley judía. 

En Valladolid, el culto inició el siglo dieciocho y se basó en una leyenda local que hasta nuestros días sigue siendo parte de las tradiciones más arraigadas de esta ciudad, siendo el motivo para la realización de la feria del pueblo. 

La historia evoca al encuentro de un indio maya con la imagen de una mujer que cargaba en un brazo a un bebé y en el otro una vela encendida, de donde se origina el término de "Virgen de las Candelas". 

En una de las dos narraciones populares se dice que antes de caer la noche la mujer le pidió al hombre que la ayudara a proteger al niño con las palmas que llevaba, y así lo hizo. No sin antes ingresar al monte para cortar maderas donde se encontró con un compañero de la Hacienda donde trabajaba, quien lo ayudó a construir el techo. 

Se cree que el camino que une a Popolá con Pixoy fue el lugar donde sucedió este hecho que al comunicárselo al sacerdote, no les creyeron; bastó ir al lugar donde se encontraron con la imagen de la Virgen de la Candelaria y a partir de ese entonces, alrededor de 1907, comenzó la veneración en Valladolid. Sin embargo, existen indicios que el culto se hacía desde 1840. 

En honor a la imagen se construyó un camarín donde se venera a finales de enero y principios de febrero, fechas de la feria agrícola, ganadera, comercial, turística y artesanal. 

La Iglesia de La Candelaria se ubica en la 44 por 35 en el barrio del mismo nombre. 

NotiRASA

Nota escrita por

Fidel Dzib

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El culto a esta imagen inició el siglo XVIII y se basó en una leyenda local que hasta nuestros días es parte de las tradiciones más arraigadas de la ciudad

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