Inician proceso jurídico por el predio derrumbado

El predio que colapsó la mañana de este jueves en la calle 54 entre 65 y 67 del centro de Mérida obligó, en primera instancia, a mover los paraderos de camiones de ese sitio que ahora quedaron más adelante y al cierre de los establecimientos que volverán a funcionar hasta que se emita un peritaje que determine el riesgo que representa la zona.

Enrique Alcocer Basto, subdirector operativo de gobernación del Ayuntamiento de Mérida, señaló que  todo el entorno está siendo verificado por protección civil y como medida de seguridad se acordonó el área reforzando con vallas metálicas -que pese a que afectan un carril de seguridad, la protección del ciudadano es primero.

 Agregó que un primer peritaje arrojó que no hay riesgo inminente que se caiga pero se están haciendo estudios para descartar o detectar si es un riesgo latente, aunque a la vista no aparenta.

“Como parte de este cordón de seguridad no están funcionando los establecimientos comerciales que funcionan en este predio en los diferentes locales en que están divididos. Son 7 locales los que han dejado de funcionar, entre estos locales está una agropecuaria” comentó.

Ahora dijo el entrevistado se está comenzando un proceso jurídico para citar a los propietarios y acceder a predios para un dictamen más avanzado respecto al estatus que tienen. Además, agregó en toda la zona y entorno se realiza verificaciones por protección civil para ver el estado en los que están funcionando los establecimientos del alrededor.

Los establecimientos señaló Alcocer Basto “no van a poder abrir hasta que los peritos estructurales digan que es seguro, e incluso si nos dicen que no es seguro, se les comunicará que no podrán funcionar hasta que se corrijan los riesgos estructurales. Las circunstancias son las que obligan a tomar estas medidas, el Ayuntamiento no se puede quedar cruzado de brazos y tiene que actuar en consecuencia”.

Remarcó que el desplome fue en el techo  que al caer sobre el techo de la planta baja lo desplomó y se llevó la fachada de la parte de arriba. Agregó que los trabajadores pernoctaban en ese lugar y estaban cerca de iniciar sus labores.

Según dijo eran 15 trabajadores, 13 albañiles y un herrero, los que estaban laborando en el momento del derrumbe.

Sobre los edificios contiguos, el funcionario municipal dijo que también se están verificando los predios aledaños y se invitó a la población a que si ven un establecimiento y consideren que las condiciones son riesgosas que reporten al 9- 24-40-00 para enviar personal especializado a realizar una inspección antes de que ocurra una desgracia.