Ciudadanos exigen mejores servicios públicos

Al menos 200 familias de las colonias San Antonio Hool, Dzitya y Bellavista, ubicados al norte, detrás del periférico de Mérida, se dicen cansados y hasta preocupados por la situación en la que viven.

A pesar de que recientemente se les notificó que ya habían recibido la municipalización, durante meses han tenido que vivir sin servicio de agua, luz, calles pavimentadas, pozos de extracción o espacios verdes para una sana convivencia.

En vez de eso, son más los camiones y tractores de constructoras que circulan día con día en estas colonias, causando estragos en las calles, levantando polvo por las casas o dejando residuos en las banquetas, lo cual complica la circulación de los vecinos…

“La problemática más grave es que los constructores empiezan a hacer sus obras, dejan material en la calle, hacen hoyos y definitivamente a ellos no les interesa volver a cubrir las calles… hablamos a desarrollo urbano, no tienen licencia de construcción, dieron nombres falsos, vino agua potable, no tienen permiso para conectarse a la toma, se conectaron clandestinamente, vino agua potable y les cancelaron la obra, vino desarrollo urbano y no sé de qué manera siguen trabajando”

La exigencia de estas familias es que las constructoras que han estado llegando a esta zona, no cuentan con permisos de parte de desarrollo urbano, se dedican a destruir las pocas calles con las que cuentan, además de no contar con seguro para sus trabajadores, por lo que temen que algún día pueda ocurrir una desgracia…

“Está faltando darle vigilancia a las constructoras, tenemos varios constructores que destruyen las calles, y esto nos afecta en la circulación de la zona. Por eso nos unimos en un comité vecinal para atender este tipo de situaciones… la situación más crítica es agua potable, luminarias, pozos de absorción y pavimentación que es lo más recomendable”

Aseguran que el hecho de haber obtenido la municipalización, permitirá que en breve sea el ayuntamiento quien comience a destinar recursos para invertir en estas colonias, sin embargo mientras eso sucede, han tenido que organizarse para instalar postes de luz privados, o bien pavimentar las calles por su cuenta, ya que afirman, de noche, resultaría un terreno peligroso.

Los vecinos no están en contra de la construcción de más viviendas y fraccionamientos, pero piden que las constructoras que ya están laborando, cuenten con los permisos y que estén regulados, así como encargarse de los daños que pudieran ocasionar en las calles ya existentes, porque a veces les es imposible ya circular debido al daño de las mismas…

“Sólo en auto, ella usa silla de ruedas y no puede salir porque ve las condiciones, que ni en banquetas están saturadas de vegetación y en el arrollo VEHICULAR pues menos”

Inclusive han pegado mantas en diferentes paredes de casas pertenecientes a la zona, para advertir a futuros vecinos o empresas constructoras que quieran invertir por el rumbo.