Aprueban Ley de Bienestar Obstétrico

Desde ahora las clínicas y hospitales privados del estado deberán contar con medidas concretas y permanentes para que toda mujer embarazada reciba la atención prenatal apropiada, luego de que por decisión unánime, los diputados de la LXI Legislatura votaron a favor de modificar la Ley de Acceso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, en materia de Bienestar Obstétrico.

En el marco del Día Internacional de la Mujer, la presidenta de la Junta de Gobierno y Coordinación Política, Celia Rivas Rodríguez, expresó que con la aprobación de esta iniciativa de ley, Yucatán pone el ejemplo y se sientan precedentes para que se brinde una atención de calidad durante el embarazo.

 “Es un problema que existe en todo el país, el tema de la falta de atención a mujeres que van a dar a luz y que a veces no son atendidas con oportunidad, pues no conocen sus derechos como mujeres embarazadas, me siento muy contenta pues Yucatán crea un antecedente en este sentido” explicó.

La legisladora puntualizó que desde ahora tanto servidores públicos, como médicos ya sea en hospitales públicos o privados, deberán estar bien informados y brindar la atención adecuada a las yucatecas antes, durante y después del parto; además de que también se deberá capacitar a las mujeres en lugares marginados sobre los derechos que tienen al estar embarazadas.

 Sobre las sanciones, dijo, que las sanciones a quienes incurran en alguna omisión o acto que violente el proceso de embarazo en alguna institución, se encuentran establecidas en la ley de responsabilidades de los servidores públicos, mismas que a partir de estas reformas serán difundidas entre la ciudadanía.   

 “Lo que señala esta reforma que es a la Ley de acceso a las Mujeres a una vida libre de violencia es que en cualquier situación de este tipo, se tiene que informar y comunicar a todas las mujeres que existen las sanciones” explicó.

Antes de finalizar, Rivas Rodríguez precisó que con esta reforma se introduce una política pública en materia de salud para prevenir y erradicar actos que pudieran dañar a las mujers embarazadas, además de que se garantiza la atención apropiada y los factores psicológicos a los que una mujeres se enfrenta en el proceso de embarazo.