Tizimín: Anécdota de cómo era el convento.

13 de agosto de 2012

Tizimín: Anécdota de cómo era el convento.

Desde la fundación del convento franciscano de Tizimín en 1563, que hoy es solo un atractivo valorado de la ciudad, existen anécdotas de vivencias plasmadas en libros.


Según la narración del conocido historiador tizimileño Luis Pérez Salazar, eran 4 monjes franciscanos que vivían en el Convento y bebían agua que extraían de una noria ubicada frente al Parque Juárez, mientras que los indígenas tomaban agua de otra, cerca de un cenote llamado ‘Boox chen’.


Las cuadras alrededor el convento conformaban un huerto, que cultivaban los tizimileños de esa época.


“Y también menciona que había algodón, chicozapote, aguacate, habían tomates, chiles, guayabas, (ante de que fueran casas) si habían unas casitas alrededor que eran de los indígenas, que eran de madera, de palitos, de huano y también había una estancia de vacas”


Alrededor de 1890 cuando se destruyó gran parte del convento al construir calles como la 51 y 48, se perdió la mayoría de la fachada del templo religioso, que estaba unido a la iglesia en honor a los tres reyes.


Pérez Salazar presume que el convento estaba rodeado de arcos que con el tiempo fueron demoliendo. Incluso, en la parte frontal del edificio, sobre la calle 51, se puede notar dos arcos sellados, que eran pórticos principales donde llegaban otros frailes a supervisar el monasterio.


La desaparecida fachada del convento franciscano, hoy es un recuerdo para los tizimileños de esa época que suelen charlar en el parque Francisco Cantón sobre cómo ha cambiado la ciudad los últimos 50 años.


Noticieros Cadena RASA, Fidel Dzib.

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