México, un país peligroso para el Periodismo

Como parte de las actividades mensuales que realiza el Comité Conmemorativo del Primer Congreso Feminista 1916-2016, se realizo este sábado un foro llamado “Libertad de Expresión y Derecho a la Comunicación de las Mujeres” el cual estuvo a cargo de Asociación Civil Comunicación e Información de la Mujer (CIMAC).

De acuerdo con las ponentes México es uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo, según la Organización de los Estado Americanos, tan solo de 2002 a 2013 la CIMAC registro 184  casos de violencia contra mujeres periodistas, entre los cuales destacan 11 femenicidios.

De acuerdo con Cirenia Celestino Ortega coordinadora de estrategias de comunicación y observatorio de CIMAC, a pesar de estas cifras en el país existe la “invisibilidad y la naturalización” de la violencia contra la mujeres, justificando dichos asesinatos como riesgos de trabajo o con la clásica frase “gajes del oficio”, colocando de esta manera a las informadoras en una situación de desventaja, alejándolas de la justicia y por ende de la reparación de los daños personales.

También dijo que las cifras han ido en aumento,  y hasta la fecha se ha reflejado un incremento de un 400%, y que de las 32 entidades federativas no hay ni una libre de violencia, sentencio que Yucatán no solamente contra las mujeres del gremio sino en general,  ya que la violencia no solo se reduce en actos físicos, esta puede ser verbal, económica, de acoso, pero por temor a muchas cosas esta no se denuncia,  lo que significa que nuestra entidad no está libre de pecado para tirar la primera piedra.

Entre los temas abordados también dieron a conocer que casi la mitad de las y los periodistas laboran  en más de un medio de comunicación, donde solo el 26% de las mujeres ocupan algún puesto de dirección, habiendo una brecha de ingresos considerable.

La CIMAC es una asociación de ya 20 años de formación perteneciente a la Red Nacional de Periodistas, y tiene como objetivo hacer conciencia en la materia y colocar la condición social de las mujeres en la agenda pública de los medios de comunicación.